En un reino lejano, habitaba un anciano sabio muy famoso por su sabiduría y serenidad. La gente viajaba grandes distancias para escuchar sus palabras de aliento y sabiduría. Todos en el reino, desde el rey hasta el ciudadano más humilde, lo respetaban y lo tenían en alta estima.
Un día, el rey decidió poner a prueba la sabiduría del anciano. Mandó a su mensajero con una nota que decía He oído que eres el hombre más sabio del reino. Si es así, ven al palacio y responde a mi pregunta ¿Cuál es la única cosa que puede asustar a una persona sabia.