Se busca deportivo pequeño, purista, sin nada de electrificación, sistemas híbridos ni motores eléctricos, sin muchos caballos, pero, eso sí, con muchas ganas de hacértelo pasar en grande al volante. ¿Candidatos? Pues hemos traído dos, y los dos hablan japonés. Te presento al Mazda MX5 RF, con techo duro y al nuevo Subaru BRZ. ¿Cuál es mejor en esta comparativa?

Está claro que si le has echado el ojo a uno de estos dos es porque a ti no te va la conducción aburrida, o por lo menos no todo el tiempo. Y lo mejor es que no necesitas un motor V8 para divertirte. ¿Por qué? Porque no todo son caballos en este mundo.

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El último en llegar es el Subaru BRZ y quiere lucir una carrocería impactante al primer golpe de vista y lo consigue, con unas líneas musculosas y fluidas a la vez. Pero ojo: delante tiene a un Mazda MX5 RF por el que no parecen pasar los años y se mantiene tan actual como en 2015, cuando salió al mercado en su última generación.

Voy a hacer un repaso rápido de lo que más me gusta del BRZ. Ya sabéis que es primo hermano del Toyota GR86 con el que comparte un montón de piezas. También lo hace en diseño, con unos faros afilados que sobresalen sobre un capó muy bajo, con dos grandes nervaturas y gran boca inferior de refrigeración.

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En Mazda recurren a los mismos elementos, con una gran parrilla, faros todavía más afilados y entradas de aire más pequeñas y no tan verticales. Los dos tienen una silueta muy parecida y eso que estructuralmente son distintos: en el Mazda hablamos de un targa con techo duro, mientras que en el Subaru tenemos un coupé con todas las de la ley. 

¿Hablamos de motores?
El del Mazda es un bloque de dos litros, cuatro cilindros, sin turbo, ni electrificación: solo inyección directa para lograr 184 CV a 7.000 rpm. El del Subaru, fiel a su filosofía es algo más especial y estructuralmente no tiene nada que ver. 

También es un cuatro cilindros y tampoco va sobrealimentado, pero la gran diferencia es que los cilindros van horizontalmente opuestos y eso tiene sus ventajas, como que el centro de gravedad es más bajo porque el motor puede ir montado más abajo: 234 CV, 50 más, y 250 Nm de par, 45 más que el Mazda. 

Ambos llegan con cambios manuales de seis relaciones y envían la fuerza al eje trasero. ¿Quieres saber cómo se las gastan estos dos pequeños deportivos? Pues te invito a que le des al play y disfrutes de esta comparativa entre el Mazda MX5 RF y el Subaru BRZ. Al final te diremos el precio y con cuál nos quedamos nosotros como ganador.