Hoy se ha sentado frente a los micrófonos de El Faro una auténtica soñadora. Durante su infancia lanzaba botellas al mar llenas de mensajes esperando que alguien las leyese y vivía con el convencimiento de que era un hada. En la adolescencia quiso ser bailarina de ballet, y trabajó mucho para poder verse en los grandes escenarios de Londres. Y, cuando llegó a la universidad, soñó con ser física para entender los porqués del mundo, aunque pronto cambió de opinión: "Hablé con Conchita, mi tutora y profesora de literatura, y ella, entre carcajadas, me dijo lo mío no era la física, que lo que a mí se me daba bien era escribir. Y esto fue una auténtica revelación para mí", nos ha contado Julia Navarro. Siguió sus consejos y estudió periodismo, profesión que ejerció durante 40 años, y ahora es una de las escritoras más importantes de este país.