El caballo llega al Perú con los españoles; su permanencia entre las diferentes regiones del país (costa, sierra y selva); desarrolló en las generaciones sucesivas, caballos de gran musculatura, tendones compactos y cascos resistentes, dando lugar a un ejemplar totalmente distinto y sobrio; que evolucionó hasta convertirse en una de las razas más puras del mundo, naciendo de esta forma el CABALLO PERUANO DE PASO, denominado embajador Cultural del Perú y Patrimonio Cultural de la nación.
En el Cusco, la crianza del caballo peruano de paso es una afición y pasión que también tienen muchos cusqueños que conoceremos en el siguiente informe.